Pietà (teología)

La piedad ( del latín pietas , en griego clásico εὐσέβεια) es un concepto teológico que describe el afecto, el respeto y la obediencia que el creyente tiene por Dios y por las cosas sagradas. Según la teología cristiana estos sentimientos no se deben al temor del creyente al poder de la divinidad, sino a una necesidad interior de gratitud por el amor que los fieles sienten que reciben de su Dios [1] .

En la teología cristiana , la piedad es uno de los siete dones del Espíritu Santo , es decir, una de esas disposiciones habituales que califican la relación del creyente con Dios [2] , haciéndolo capaz de desear lo que Dios quiere, y alcanzar esa confianza que le permite que se dirigiera a la divinidad llamándola "padre".

Aunque la piedad en sentido cristiano es principalmente un atributo de la relación del creyente con Dios, también lo dispone a una actitud de delicadeza y respeto hacia el prójimo como reflejo de sentirse hijo del mismo padre [3] .

Ejemplos de esta actitud están presentes tanto en el Antiguo como en el Nuevo Testamento .

Movimientos Religiosos

El pietismo fue una forma de religiosidad protestante que surgió en controversia con el luteranismo institucional . Se desarrolló en la segunda mitad del siglo XVII y finalizó en la primera mitad del siglo siguiente.

Notas

  1. ^ "Misericordia es ternura por Dios, estar enamorado de él y querer darle gloria en todas las cosas. ¡La misericordia del Señor ha sido tan grande con nosotros que desea nuestro amor por él! El cristiano no sólo busca los consuelos de Dios, sino desea hacerle compañía en su alegría y en su dolor por el pecado del mundo". Carlo Maria Martini : Tres cuentos del Espíritu , 1997-98.
  2. ^ Cf. Catecismo de la Iglesia Católica , nn. 1830 ss.: Los dones y frutos del Espíritu Santo .
  3. ^ Juan Pablo II : Ángelus del 28 de mayo de 1989 .
  4. ^ "Cuando ores, di Abbà..." ( Lc Lc 11,2 , en laparola.net . )

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