En este artículo vamos a explorar Grupo Proximus, un tema que ha generado gran interés y debate en los últimos años. Grupo Proximus es un concepto que ha capturado la atención de expertos en diferentes campos, y su relevancia ha ido en aumento en la sociedad contemporánea. A lo largo de este artículo, analizaremos distintos aspectos relacionados con Grupo Proximus, desde su historia y evolución hasta su impacto en la actualidad. También examinaremos diferentes perspectivas y opiniones sobre Grupo Proximus, con el objetivo de proporcionar una visión integral de este tema. Independientemente de tu nivel de familiaridad con Grupo Proximus, este artículo busca ofrecer una nueva mirada y profundizar en su comprensión.
Grupo Proximus | ||
---|---|---|
![]() | ||
![]() | ||
Tipo | Public Limited Company | |
Símbolo bursátil | Euronext: BELG | |
ISIN | BE0003810273 | |
Industria | Telecomunicaciones | |
Forma legal | sociedad anónima | |
Fundación | 1930 (como RTT) | |
Sede central |
Bruselas, ![]() | |
Personas clave | Dominique Leroy (CEO), Stefaan De Clerck (Chairman) | |
Productos | Telefonía fija y móvil, internet, televisión digital, servicios TIC | |
Ingresos | €6.552 millones (2010) | |
Beneficio económico | €1.619 millones (2010) | |
Beneficio neto | €1.266 millones (2010) | |
Activos | €8.511 millones (final 2010) | |
Capital social | €3.342 millones (final 2010) | |
Empleados | 16.310 (ETC, final 2010) | |
Filiales | Belgacom ICS, Scarlet, Skynet, Tango. | |
Sitio web | proximus.com | |
El Grupo Proximus (anteriormente Grupo Belgacom) es la mayor compañía de telecomunicaciones de Bélgica, con sede en Bruselas. El Grupo Belgacom es principalmente de propiedad estatal, poseyendo el estado belga el 53.3% + 1 de las acciones. Los servicios que ofrece el Grupo Belgacom incluyen telefonía fija a través de la marca Belgacom, comunicaciones móviles a través de la marca Proximus y servicios TIC dirigido al mercado profesional bajo la marca Telindus.
En 1879, el servicio belga de telegrafía instaló una línea telefónica en el Parlamento. El mismo año, algunos contratistas privados presentaron ofertas para operar redes de telefonía en varias ciudades belgas. La falta de legislación durante los primeros cinco años de operación redujeron las oportunidades de desarrollo de la red de telefonía. También forzó a las autoridades belgas a crear un marco legislativo para regular estas actividades en Bélgica.
En 1895, el sector de telefonía pasó enteramente a manos del sector público.