El monte bajo (del latín caedo , "corto") es una forma de gestión forestal basada en la capacidad que tienen algunas plantas de emitir brotes si se cortan. Este tipo de formación boscosa está por lo tanto constituida esencialmente por hijuelos , es decir, por árboles provenientes de renovación agámica (multiplicación vegetativa). Con el corte, la población no se repone en su totalidad sino solo en la parte epigea. En los árboles es posible identificar cuatro tipos de yemas:
Los retoños se dividen en "verdaderos" y "falsos". Las primeras son las que surgen de cogollos provenzales y ya están conectadas con el sistema vascular de la planta por lo que son más vigorosas y sobre todo estables. Las que surgen de yemas adventicias requieren de un tiempo más o menos largo para crear relaciones de conexión con los vasos de la planta, resultando mecánicamente más inestables y por tanto de escaso interés forestal.
Distinguimos dos tipos de monte bajo:
El monte bajo de la misma edad es de dos tipos: simple o matriculado. En el monte bajo simple todos los tocones se someten a corte, como sucede, por ejemplo, con la piedra. En el norte de Europa, los árboles de hoja ancha son raros y están sujetos a rebrote total. En Italia, por ley, el monte bajo simple puede aplicarse sólo en algunos tipos de maderas compuestas de especies que dan frutos jóvenes o que emiten fácilmente retoños de raíz: en ambos casos, las matriculas pueden ser, por lo tanto, superfluas. Aunque existen diferencias entre las distintas regiones, los bosques de monte bajo de sauces, chopos, alisos, avellanos o acacias normalmente pueden estar regidos por monte bajo simple. El monte bajo matricinado , en cambio, prevé la suelta de algunas plantas que toman el nombre de matricina ; estos tienen diferentes funciones. En primer lugar, prevén la renovación, necesaria para sustituir los tocones envejecidos que han perdido su capacidad de succión. Estos son fácilmente reconocibles ya que se ensanchan y se vacían por dentro. Otras razones por las que se liberan matricinas son para asegurar la biodiversidad a través de la polinización y para evitar la erosión del suelo manteniendo siempre un cierto grado de cobertura. Algunos distinguen entre matriculas y reservas. Estos últimos tienen la misma función que los primeros, pero pertenecen a especies diferentes de aquellas de las que se compone principalmente el monte bajo. Antes de realizar un corte, se deben considerar los siguientes factores:
En el monte bajo con dirección sobre el mismo tocón hay retoños de diferentes edades. El monte bajo de dirección es una forma de tratamiento tradicional en algunas zonas, principalmente ligado a la producción de carbón. En cada tocón se sueltan chupones de una, dos y tres veces por turno. Esto permite tener diferentes surtidos y mantener una cobertura de suelo constante. El monte bajo de dirección ya no encuentra gran aplicación, tanto por la disminución de la demanda de los surtidos que se pueden sacar de este tipo de tratamiento, como porque requiere de personal muy cualificado para la ejecución del corte y porque se presta poco al uso. de la motosierra.
El corte se puede hacer:
Los tipos de corta son la sucisión, en la que el corte se hace cerca del suelo, y la tramarratura, en la que el tocón se corta unos centímetros por debajo del nivel del suelo; ambos sirven para estimular la capacidad de succión del muñón. Es importante realizar el corte para que no se produzca el estancamiento del agua, por ejemplo antiguamente se adoptó el “corte de monje”, dando a la superficie una forma redondeada para facilitar el escurrimiento del agua y favorecer la emisión de ventosas en la parte inferior del corte