Berthe Morisot con un ramo de violetas

Berthe Morisot con un ramo de violetas
AutorÉdouard Manet
Fecha1872
Técnicaóleo sobre lienzo
Dimensiones55 × 40 cm
UbicaciónMuseo de Orsay , París

Berthe Morisot con un ramo de violetas ( Berthe Morisot au bouquet de violettes ) es un cuadro del pintor francés Édouard Manet , realizado en 1872 y conservado en el Musée d'Orsay de París.

Descripción

Berthe Morisot fue una joven pintora que fascinó de inmediato a Manet quien, encantado, la convirtió en protagonista predilecta de gran parte de sus retratos. Particularmente famosa es Berthe Morisot con un ramo de violetas , donde la mujer está elegantemente vestida con un vestido negro y un sombrero de paja del mismo color: cerca del cuello se abre un ligero escote, que deja ver una blusa de encaje y un poco de tez. El conjunto se completa con unas correas para el mentón y cintas para el sombrero, obviamente negras, y finalmente un exuberante ramo de violetas, que da nombre al cuadro. En el ángulo superior derecho el cuadro está firmado y fechado: «Manet 72».

También en este cuadro Manet se muestra particularmente atento a las cualidades formales de la obra, orquestando una refinada concordancia cromática entre el delicado rosa de la tez de la mujer, el blanco homogéneo que se despliega en el fondo y, sobre todo, el negro de sus ropas. que parece brillante pero increíblemente delicado. Manet, en efecto, había entendido bien el poder desbordante de los negros, y no se cansaba de repetírselo a Morisot, su alumna, que con sus cuadros ya se acercaba a la tensión cromática impresionista, según la cual el negro debía ser excluido, como "No color". [1]

Muy particular es la textura luminística de la pintura, que es la sustancia de una luz intensa y lateral que, fluyendo desde la izquierda, se proyecta sobre la mujer de manera que la parte izquierda de su rostro brilla, mientras que la derecha queda sombreada: en así “Berthe Morisot parece ser sólo sombra y luz”, en palabras del Musée d'Orsay. El efecto resultante, en todo caso, es muy sugerente, hasta el punto de que el cuadro es considerado unánimemente como una de las máximas realizaciones del retrato de Manet: entusiastas fueron los elogios de Paul Valéry , según los cuales «en toda la producción de Manet hay nada igual al retrato de Berthe Morisot, pintado en 1872. Me llamó la atención el negro, el negro absoluto, y ese rostro de ojos grandes, cuya vaga fijeza da una sensación de profunda distracción y ofrece, de alguna manera, una presencia de ausencia ". [1]

Notas

  1. ^ a b Berthe Morisot con un ramo de violetas , en musee-orsay.fr , Musée d'Orsay. Consultado el 3 de marzo de 2017 .

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