En el mundo actual, Androción se ha convertido en un tema de gran relevancia e interés para un amplio espectro de la sociedad. Desde su impacto en la vida diaria de las personas hasta su influencia en la economía y la política, Androción ha logrado captar la atención y desencadenar debates apasionados en diferentes ámbitos. Con el paso del tiempo, su importancia y repercusión han ido en aumento, lo que ha generado un creciente interés por comprender su naturaleza, sus implicaciones y sus posibles consecuencias futuras. En este artículo, exploraremos más a fondo el fenómeno de Androción y analizaremos su significado en el contexto actual.
Androción (en griego, Ἀνδροτίων; genitivo: Ἀνδροτίωνος; ca. 410-340 a. C.), fue un orador y atidógrafo ateniense, dirigente político, discípulo de Isócrates y contemporáneo de Demóstenes.
Es conocido, principalmente, por el discurso de Demóstenes, en el que fue acusado de ilegalidad al proponer el honor de dar una corona al Consejo de los Quinientos a la expiración de su magistratura.
Androción ocupó varios puestos importantes, y durante la Guerra Social fue nombrado comisario extraordinario para cobrar los atrasos de determinados impuestos. Demóstenes y Aristóteles hablan favorablemente de sus cualidades de orador. Según María Cruz Herrero Ingelmo,
se opuso a Demóstenes en la cuestión de una alianza contra Macedonia y fue partidario de combinar una política exterior moderadamente conservadora con una enérgica política exterior contra Persia.
Se dice que estuvo exiliado en Megara, donde compuso un Atthís en ocho libros, anales del Ática, desde los primeros tiempos hasta su época. Se ha discutido si el cronista y el orador son la misma persona, pero un Androción que escribió sobre agricultura es sin duda una persona diferente. Gaetano De Sanctis atribuye a Androción el Atidógrafo, un fragmento del siglo IV a. C. descubierto por B. P. Grenfell y A. S. Hunt. Fuertes argumentos en contra de este punto fueron establecidos por E. M. Walker en la publicación Classical Review, en la edición de mayo de 1908. Parte de las obras fueron publicadas por Müller en su obra Fragmente der griechischen Historiker (1841).